27 abr 2011

El precio del poder

Cuando los primeros rumores de que Canal+ preparaba una serie de producción propia vieron la luz fueron muchos los que salibábamos por lo que podía salir de ese proyecto, sobretodo porque venía acompañado de nombres en los que podíamos confiar como Pepe Sancho o Alicia Borrachero.
Cuando vimos los primeros capítulos las sensaciones fueron muy buenas, pero ahora con la emisión del octavo le hemos puesto punto y final lo único que se puede decir es que ha sido todo un ejemplo para la ficción patria, un soplo de aire fresco y un derroche de saber hacer del que muchos deberían aprender. Un producto serio, coherente y sobretodo realista, lo que para mi le hace ganar enteros a medida que avanza.

A partir de aquí, si no conoces el desenlace de Crematorio, mejor no continues leyendo.


La historia nos presenta a Bertomeu en la cumbre de su poder y mediante flashbacks vamos conociéndose como se produjo su ascenso como constructor, como empresario, los chantajes, los blanqueos de dinero, las recalificaciones...en definitiva, los entresijos de la conocida burbuja inmobiliaria que tanto daño ha hecho a nuestro país en los últimos años.
Como lo conocimos en la cumbre sabíamos que tarde o temprano lo veríamos caer y tratándose de una serie de 8 capítulos este hecho no ha tardado en producirse, y junto a él la serie nos ha ofrecido sus mejores momentos.

Crematorio se ha centrado indiscutiblemente en Bertomeu pero las historias de su familia también ha ido adquiriendo interés en la recta final, y aunque a la sombra del patriarca, las he disfrutado mucho: la independencia en mayor o menos medida de Mónica y los problemas de Silvia tanto con su marido como con su hija (y a su vez los problemas de ésta).
Por esto, con el final de la serie me hubiese gustado que continuase de algún modo, porque tras la muerte de Rubén las vidas de ambas mujeres se presentaban muy interesantes, con Mónica destrozada pero con una nueva vida por delante (y otra en camino) y con Silvia dispuesta a seguir los pasos de su padre (aunque no sabemos hasta dónde sería capaz de llegar) a pesar de haberla llevado al gran caos en que su vida se había convertido.


El punto fuerte y el rasgo definitorio de la serie bajo mi punto de vista ha sido el realismo del que se ha impregnado la serie en todos los aspectos. El fiel reflejo de la corrupción urbanística, de las traicones, de las mafias...no podía conducir a otro desenlace que no fuese el que fue: el desastre cuando la verdad sale a la luz y todos los implicados acaban entre rejas. Bueno, todos no, casi todos, que los hay muy listos en este mundo y escapan a tiempo, o eso intentan.
El que no pudo escapar a su destino fue Rubén Bertomeu, quien tras un tiro en las tierras que lindan con su finca muere entre el polvo a manos del señor al que intentó por todos los medios quitar del medio.

El precio de la ambición es muy alto y no todos están dispuestos a pagarlo, pero una vez que lo has hecho es difícil ponerle freno, por lo que el final puede ser de lo más impredecible (y sino que se lo pregunten a Rubén).

Crematorio ha demostrado con su breve recorrido que otra ficción nacional es posible, que podemos hacer grandes cosas, que hay medios, actores y guiones que con un poco de confianza por parte de cadenas y productoras se pueden sacar muy buenos productos adelante.
Hace falta otro modelo, ya que no olvidemos dónde ha visto la luz esta serie y al reducido público al que se dirije, pero lo importante es que poco a poco vamos dando pasos al frente. Esperemos que otros los sigan.

10 comentarios:

seriéfilo dijo...

yo tb estoy totalmente deacuerdo contigo, es una linea que debe seguirse el mercado español, y me alegro de no ser el único al que le haya gustado.

27 de abril de 2011, 20:41
Visionado dijo...

Pues yo no soy tan positivo... Me alegra que por fin se puedan hacer series más independientes y creo que 'Crematorio' ha sido un buen primer paso pero tampoco creo que rebose tanto buen hacer respecto a otras producciones españolas. Por suerte ya tenemos a grandes actores como LLuis Omar trabajando en otras series nacionales en abierto y creo que la factura técnica de algunas de ellas poco tiene que envidiar a 'Crematorio'.
El mérito sí creo que está en la historia. La ficción española en abierto está mejorando mucho y se atreve poco a poco con cosas más originales pero siempre caen en historias que le gusten a hijos, padres y abuelos. Ahí es donde está el mérito de 'Crematorio', que está hecha para quien la quiera ver, tranquilamente y sin miedo a que la gente vaya a cambiar de canal. Ahí sí tiene mérito y espero que Canal+ y otras cadenas de pago sigan por esta senda haciendo cosas diferentes.
Y sin tener en cuenta de dónde viene la serie, lo cierto es que me ha gustado pero no me ha encantado. Para mi gusto le faltaba un poco de densidad en los guiones y el cuerpo me pedía algo un poco más truculento pero también es verdad lo que señalas de que una de las claves de la serie es la naturalidad y, aunque cuesta, te acaba enganchando. Vamos, que me ha gustado y me parece un avance, pero sin excesos.
P.D. Perdón por el rollaco que acabo de soltar... xD

27 de abril de 2011, 22:46
Dani dijo...

Yo estoy de acuerdo. Los 3 personajes que dices son perfectos, y yo añadiría al abogado, que aunque en el episodio final ha estado un poco desaparecido, en el resto de la serie me pareció bastante destacable.

No me ha parecido una imprescindible, pero entre esta y otras que he visto últimamente (Vientos de Agua, Mujeres) estoy apreciando la ficción nacional mucho más. A ver cuál es la siguiente sorpresa.

28 de abril de 2011, 12:20
Un telespectador más dijo...

Seriefilo, por lo que veo no somos los único en disfrutarla, pero lamentablemente ha pasado bastante desapercibida.

Héber Sentil, está claro que se le pueden poner peros, no es perfecta, pero es un gran paso adelante que esperemos que sigan el resto de cadenas, aunque quieran dirijirse al gran público (sinceramente, Crematorio no es para arrasar, pero un 13 podria hacer, sino más en TVE).

Dani, ahora el siguiente paso es Desaparecida, que aunque no la vi porque me spoilee el asesino, es una serie altamnete recomendable ;)

28 de abril de 2011, 16:04
Atticus dijo...

Pues me ha gustado muchísimo, ya te digo. Ojala hagan más series así, ya es un punto de partida.

29 de abril de 2011, 21:21
buffymak dijo...

Un planteamiento que debería ser digno de imitación en un futuro esperemos que inmediato. Plagada de grandes actores,con una trama atractiva y por desgracia demasiado cercana Ha sido todo un acierto ^_^

30 de abril de 2011, 11:49
Fhilippos dijo...

No puedo estar más de acuerdo. Ha sido una gozada de serie en todos los aspectos. El principio es muy "denso", pero una vez que coge el ritmo se vuelve imparable. Un ejemplo de que en España se pueden hacer series de las que la HBO estaría orgullosa, con buenos guiones, buenos actores (Sancho y Borrachero indiscutiblemente los mejores y se comen al resto sólo aparecer en pantalla), buena dirección, cuidadísima escenografía... En resumen, una maravilla. ¡Y es patria!

Que esto sea el principio.

30 de abril de 2011, 17:04
LiPooh dijo...

Me ha gustado mucho. La trama está muy bien planteada y los actores hacen en general muy buen papel.
Creo que el final está bien como está. Con las dudas que plantea, por mucho que queramos saber qué ocurre con la familia.

Saludicos.

2 de mayo de 2011, 11:31
Fon dijo...

"Crematorio" ha sido un placer. Y un placer que sabe mejor sabiendo que una serie española puede ser tan grande como muchas de las que vemos y que vienen del otro lado del charco. No soy capaz de encontrarle un pero. Me atrapó desde el principio. Todos sus personajes me interesaban (aunque me supo a poco Sarcós, quería saber más de él). Juana Acosta me ha sorprendido mucho. Y a Sancho y Borrachero, como los tenía más vistos, sabía que me iban a regalar todos y cada uno de sus planos.

2 de mayo de 2011, 14:02
Adicto tv dijo...

Antes de alabar a Crematorio decid que creo que esta serie en Telecinco no hubiese tenido éxito y que hay series de calidad que no tienen audiencia.

La serie está muy bien hecha, guiones, actores, vestuario, presupuesto, escenografía. Todo acompaña.

Con Crematorio he redescubierto a Pepe Sancho, descubierto a Juana Acosta que me fascina, y ha hecho que me gusten aún más Aure Garrido y Alicia Borrachero.

Quiero una segunda temporada YA.

3 de mayo de 2011, 12:11