Six Feet Under prosigue su excelente andadura

Six Feet Under prosigue su excelente andadura

Estas navidades están siendo las de las joyas de la HBO, si anteriormente comentaba la impecable primera temporada de Roma, hoy le toca a la tercera de Six Feet Under, la cual acabo de finalizar hace unos minutos.
Después de dos muy buenas temporadas le tenía cierto miedo a esta tercera, no porque no confiara en la familia Fisher, sino porque muchos eran los comentarios que decían que se hacía demasiado oscura, que baja un poco el nivel y que en ocasones podría hacerse pesada o excesivamente lenta, afortunadamente no he notado ese bajón y he disfrutado de lo lindo con el agudizamiento del desequilibrio de esta peculiar familia con un final de temporada perfecto.

A partir de aqui, spoilers de esta tercera temporada.

Esta temporada se ha caracterizado más que nunca por las relaciones de pareja: Nate con Lisa, David con Keith y Claire primero con el músico y después con su compañero de clase, todas y cada una de ellas relaciones tormentosas, atravesando algún momento dulce también, pero en líneas generales marcadas por el sufrimiento. Ruth ha seguido en su línea, intentando recuperar el tiempo perdido durante su matrimonio, y aferrándose a cualquier oportunidad para ser feliz, bien sea con el becario o con este último novio (que digo novio, marido ya! xD).

La incorporación de Lisa esta temporada ha sido todo una cierto, aunque nunca me haya caído especialmente bien, porque ha dado mucho juego, ha revolucionado a Nate y lo ha llevado a los infiernos con su desaparición y posterior muerte. Afortunadamente para él, esto le ha llevado a conocerse más a si mismo y le ha hecho más fuerte. Espero que a partir de ahora por fin encuentre su camino y sea verdaderamente feliz junto a Brenda.

David y Keith tambien han tenido sus bajones esta temporada pero han intentado solucionarlos mediante la terapia de pareja y, aunque hayan tenido sus deslices y pasado por más de una dificultad, parece que han conseguido liberarse y abrir una nueva etapa mejor. La verdad que espero que asi sea, pero con el fuerte carácter de Keith y la sensibilidad de David lo veo complicado (y mira que le tengo cariño a esta pareja...).

Pero más debilidad siento por Claire, quien sigue dando tumbos de hombre en hombre hasta econtrar a alguno que realmente merezca la pena y al trate como ella se merece. Sin duda es la que más está madurando desde el inicio de la serie y su trayectoria es impecable. Se encuentra todavia un poco perdida, pero poco a poco estoy convencido de que sabrá encontrar su lugar (y alguién que merezca la pena también).

Cerrando la familia Fisher nos encontramos con Ruth, una mujer completamente nueva tras la muerte de su marido, más activa, más guapa, más libre...en definitiva más feliz. La primera mitad de la temporada la pasó junto a su nueva amiga, quien le descubrió un nuevo mundo, y la segunda mitad coqueteando con el inocente del becario para terminar en los brazos su nuevo jovial marido.

Pero si los Fisher estaban inmeras en serias crisis (aunque también, cuando no lo están!), los Díaz se podría decir que peor. Nunca habíamos visto a Vanessa así, pero lo cierto es que tampoco ha extrañado lo más mínimo: un trabajo a tiempo completo, dos hijos pequeños y un padre muy ausente son un cóctel explosivo para cualquiera. Lamentablemente parece que en lugar de unirse para salir de la crisis, se están separando cada vez más, y la infidelidad de Rico no es lo más grave que les está por venir a esta pareja de seguir con esta tónica (encima tienen al enemigo en casa con forma de hermana).

En conclusión, que para mi ha sido una gran temporada ya que cada uno de los personajes ha tenido que enfrentarse a sus miedos más profundos: a la soledad, a las infidelidades, a sus inseguridades y a la muerte.
Que grande es Six Feet Under