The It Crowd, Los Informáticos

The It Crowd, Los Informáticos

Hace escasos 10 minutos terminaba el capítulo 6 de la primera temporada de Los Informáticos, o lo que es lo mismo, el capítulo final de temporada, y como veis me ha faltado tiempo para venir a comentarla.

Para los que no la conozcan, que espero sean pocos porque es una serie bastante buena, la serie nos relata las aventuras y desventuras del departamento de informática de una gran empresa, formado por Roy y Moss y en el que acaba de llegar una nueva empleada, Jen, que apesar de no tener ni idea de informática su don de gentes hará que se integré a la perfección en ese universo friki que ambos tienen creado.

Se que la mayoría de los que la han visto adoran a Moss, yo entre ellos, pero sin lugar a dudas si me tuviera que quedar con alguno de los tres personajes sería con Jen, esa gran mujer que ha logrado imponerse en un mundo creado por y para Moss y Roy.

Es cierto que los tres tienen puntos muy buenos, y que las tramas de los chicos sobresalen por el toque absurdo que las domina pero es que las de Jen son geniales, desde que comenzó con su entrevista de trabajo (sus conocimientos de informática me mataron: "ver emails, recibir emails, enviar emails. Click, doble click) hasta todo el tema de la visita de la tía Irma han sido geniales.

Pero no solo ellos tres merecen unas palabras, sino que tanto Denholm Reynholm el caricaturizado jefe moderno con sus escentricidades, como Richmond el trabajador gótico que se esconde tras la puerta roja (que gran momento su encuentro con Jen) son muy buenos, con puntos brillantes que nos proporcionan grandes escenas.

Momentos como el de los zapatos rojos de Jen, la taza de Moss, el anuncio en contactos de Roy, o el propio capítulo 6 entero hacen de la serie una de las imprescincibles.
Cierto que no está al nivel de comedias como Como conocí a vuestra madre pero el hecho de que solo tenga 12 capítulos en total de 23 minutos supone un gran aliciente para verla estas calurosas noches de verano. Las carcajadas están aseguradas.

Ahora que he redescubierto el humor británico, el que por cierto no tiene nada que envidiar al estadounidense , me pondré con archirecomendada por Sunne Extras, que espero no me defraude.