El humo ya ciega mis ojos

El humo ya ciega mis ojos

Mad Men llevaba ya varios años siendo una de mis grandes pendientes, por lo que la excusa del parón de series que vivimos me vino que ni pintada para ponerle remedio. Tengo que reconocer que no iba a ciegas, ya que el piloto lo había visto cuando lo estrenó Cuatro en su madrugada, pero las condiciones no fueron las idóneas y la serie y yo no conectamos (vamos, que me aburrió soberanamente). Desde ese momento, tras cada nominación, tras cada gran crítica, tras cada premio que recibía, me iba alejando más y más de la serie, creciendo mi manía hacia ella.

¿Era tan buena como para desbancar sistemáticamente a Dexter o Breaking Bad? ¿Merecía tanto revuelo? Animado por unos cuantos bloggers y su Proyecto Mad Men había llegado el momento de ponerme seriamente con la serie. ¿El resultado? Primera temporada finalizada en 3 días, creo que el maratón habla por si solo, pero de todos modos, vamos a entrar un poco en materia evitando spoilers, por si todavía no habeis disfrutado de la serie.

Como últimamente viene siendo habitual por aqui, lo primero es alabar lo conseguida que está la ambientación, vestuario y demás, aunque viniendo de una serie USA parece que este aspecto ya no debe destacarse, porque siempre suele ser perfecto, pero aun asi siento que debo hacerlo (muy acertada la inserción de anuncios, productos o noticias de la época).
Del mismo modo hay que destacar el tan excelente como grande abanico de personajes que componen la serie, todos y cada uno con una personalidad muy compleja y bien definida.
En cuanto a las tramas, creo que a nadie debe sorprender si afirmo que Mad Men es una serie lenta, en el buen sentido de la palabra, donde no encontraremos grandes tramas o mucha acción, sino que nos limitamos a acompañar a los personajes en su día a día en Sterling & Cooper. Lo que podría parecer aburrido en un principio, se demuestra en cada capítulo lo mucho que una agencia publicitaria puede dar de si, y más cuando en ella trabajan grandes prsonajes como Pete Campbell, Peggy Olson, Roger Sterling o Betty Draper.

No os extrañeis porque aun no haya mencionado a Don Draper, pero es que él, junto con Joan merecen un tema aparte como los dos personajes más interesantes que día a día pisan esa oficina. Él por todo lo que arrastra consigo, desde sus demonios del pasado que tanto le siguen inlfuyendo y marcando en sus acciones y decisiones, y ella por ese carisma que irradia, por ser esa femme fatale tan imprescindible en cada gran serie.

Ahora bien, Mad Men tiene todas las cualidades para convertirse en una de mis series favoritas, para que la denomine grande como casi todos los que la han visto. Pero eso será más adelante, porque esta temporada se ha quedado en buena sin más, han sido 13 apitulos muy interesantes, presentandonos una historia y unos personajes que prometen dar mucho de si, con un final que augura muy buenos momentos. Pero hasta entonces, la dejamos en una buena serie altamnete recomendable.