Imperium, lo que puedo haber sido y no fue


Cuando se anunció la continuación de la historia de Hispania mediante una nueva serie centrada en Roma, y protagonizada por Lluís Homar y Pepe Sancho, no puede evitar echarle un vistazo a su piloto, porque todo apuntaba a que viviríamos un duelo interpretativo de los que hacen historia. Y así, además de vivir un magnifico enfrentamiento entre estos dos grandes actores, las tramas se presentaron con solvencia, prometiendo acción, muertes y sobre todo traiciones e intrigas familiares que nos mantendrían enganchados en su breve primera temporada (compuesta por solo 6 episodios).

Excelentes actores, interesante punto de partida, magníficos decorados, cuidado vestuario, destacada fotografía...todo estaba dispuesto para lograr sacar adelante una de las series más ambiciosas de la ficción española, pero el público no respondió. Quizás por que la cadena no supo vender la serie diferenciándola de su predecesora, o por que el público al que va dirigida este tipo de ficción no estaba en la cadena, pero lo cierto es que no despertó interés desde el principio. Y fue una lástima, porque estábamos ante uno de los mejores pilotos que se han hecho en nuestro país. ¿Mantuvo el nivel en los siguientes episodios? Lamentablemente no.

Las buenas intenciones estaban ahí, y nunca diré que fue una serie mediocre, ni mucho menos mala, pero distó bastante de mantener el nivel, con tramas repetitivas y traiciones que se podían anticipar desde el minuto uno. Fue ahí en lo que falló, en no saber manejar la tensión y los pequeños misterios que intentó plantear, ya fuese la verdad que perseguía Cora, los traidores dentro de la familia Sulpicio o el supuesto asesinato del hijo de Marco y Claudia.
A pesar de esto, las estupendas interpretaciones femeninas lograban mantener el interés, eclipsando totalmente a primeros espadas de la ficción (Sancho estuvo relegado a un segundo plano y Homar se dedicó a gritar todas sus líneas de guión, como si no tuviera más registros), encumbrando definitivamente a Nathalie Poza, poniendo el foco sobre una Elvira Mínguez soberbia y lanzando al estrellato a una cada vez más madura (interpretativamente hablando) Aura Garrido.
Por ellas ha merecido la pena esta visita a Roma, aunque no se haya sabido aprovechar todo el potencial desplegado en el piloto.
Read More

Dexter: "Todo ha cambiado"

(Spoilers sobre el arranque de la 7ª temporada de Dexter)

Con esta frase que pronuncia Debra hacia el final del 7x03: "Buck the System" podemos resumir lo que el arranque de temporada de la serie nos está ofreciendo, y es precisamente lo que más necesitaba tras el horror que supuso la anterior, en la que se tomó al espectador por tonto cuando desde el principio estábamos de vuelta de su burdo engaño.
Con ese mosqueo en mente, y el tedio por todo el asunto religioso, enfrentamos una nueva temporada con la promesa de la esperada revelación del oscuro pasajero de Dexter frente a Deb, ya no solo su hermana, sino también su enamorada. Y con las cartas por fin sobre la mesa debemos reconocerle haber sabido recuperar el nivel que hace ahora 7 años nos enamoró.

Este resurgir no solo se debe a que la verdad salga parcialmente a la luz, sino al buen retrato del impacto que esto tiene en los personajes (sobre todo en Debra), acercando más y más sus vidas para que Debra pueda ir entendido más a Dexter y sus motivaciones a la par que mantenerlo vigilado (o al menos así lo cree ella).
Pero no solo este asunto está contribuyendo al buen nivel de la temporada, sino que el caso de Viktor está comenzando a dar bastantes quebraderos de cabeza al departamento de policías de Miami, y en última instancia a Dexter, que es quien se encuentra detrás de la muerte del asesino, y a por quien va la mafia para la que éste trabajaba.

Además de estos dos frente, uno de ellos todavía desconocido para Dexter, nuestro protagonista también ha estado lidiando con el ayudante de Masukka, una trama más light que ha servido para rebajar un poco la tensión que tanto Dexter como los espectadores estamos sintiendo, y ciertamente se agradece. Porque necesitábamos un respiro, y más tras conocer que Laguerta también se encuentra cada vez más cerca de averiguar el secreto de su analista forense.

Todo ha cambiado, y para bien, porque Dexter está de nuevo camino de su mejor versión y con el final en el horizonte de su octava temporada parece que nos tocará sufrir deliciosamente con nuestro asesino favorito contra las cuerdas.
Read More

HIMYM: Un chicle que no da más de si

Como buen fan de How i met your mother que se preste, he atravesado diferentes etapas con la serie a lo largo de su historia: emoción, tristeza, diversión, aburrimiento, alegría, cansancio...una montaña rusas de emociones dependiendo del momento de forma que atravesase la serie. Pero siempre al pie del cañón, porque en las series, como en las relaciones, hay que hacer balance de vez en cuando para comprobar cuando una merece la pena. Sus personajes me tenían conquistado desde el principio, por lo que por el cariño que les tenía siempre he estado ahí, en los buenos y en los malos momentos.
Pero por supuesto, todo tiene un límite, y creo que lo están alcanzando en esta temporada.

Cuando nace una serie sus guionistas deben saber más o menos lo que nos quieren contar y lo que quieren hacer con sus protagonistas, aunque luego lleguen más pronto o más tarde a los objetivos que se habían marcado incialmente. Tengo claro que desde el principio sabían las diferentes etapas por las que querían que la relación de Marshall y Lily pasase, la maduración de ellos como pareja y sobre todo como personajes. Tengo también claro que querían que nos enamorásemos irremediablemente de Robin para que termináramos deseando que ella, y solo ella, pusiese fin a la soltería de Barney.
Así como estos cuatro personajes tienen su futuro trazado en mayor o menor medida, luego tenemos a Ted, el cual está claro que su final será conocer a la dichosa madre y formar con ella la familia ante la cual habla en el futuro.

Sabiendo todo esto de antemano, tragamos y tragamos con las diferentes relaciones que Ted nos va relatando, disfrutando siempre del camino, porque para qué negarlo, la importancia de esta serie está en el camino y no en el destino como en muchas otras. Pero aun con este, llega un punto en el que no podemos continuar tragando sin rechistar, masticando el mismo chicle una y otra vez a sabiendas de que ya no le queda sabor.
Es este precisamente el punto en el que nos encontramos, con la vuelta de Victoria a la vida de Ted como si de la segunda venida del Señor se tratase. Una relación que sabemos no va a ninguna parte, pero que se empeñaron en vendernos como algo grande al final de la temporada pasada, para lo que es peor, ahora ningunearla y quitársela de encima a las primeras de cambio. No, así no.

No voy a entrar a comentar nada de la omnipresente boda, entre otras cosas porque aunque parece una tierra prometida a la que nunca llegaremos disfruto enormemente con esos juegos temporales que intentan devolvernos a la gloriosa época inicial, aunque para no engañar a nadie diré que necesitamos avanzar pronto en la historia. Pero ya no solo en lo que a esta boda se refiere, sino a todas las tramas en general, por que ya todos los personajes se encuentran en un punto en el que no pueden dar más de si, no tienen evolución posible porque ya han alcanzado la madurez. Por tanto, deseo que esta temporada finalmente sea la última, coloquen todas las piezas en su sitio, las historias en su orden, y pongamos cara de una vez por todas a la dichosa madre.
Read More

Glee, madurando en la búsqueda de un sueño

Se que cuando terminó la tercera temporada de Glee fui el primero en darle muchos palos, afirmando que no volvería al McKinley en su regreso a las clases, pero entre el mal hacer de las nuevas series y el interés que las apariciones de Sarah Jessica Parker y Kate Hudson despertaron en mi me decidí a darle una última oportunidad. Ahora, tras 4 episodios emitidos, no puedo estar más satisfecho de haberlo hecho porque ha remontado el vuelo como pocos podíamos esperar, sobre todo si tenemos en cuenta que rara vez las series teen consiguen encontrar el tono con el paso de sus protagonistas a la universidad.

Es precisamente esto lo que me está resultando más interesante de esta nueva tanda de episodios, el equilibrio entre las tramas que suceden en el McKinley y las que se desarrollan en New York. El nuevo New Directions se encuentra todavía ensamblando sus piezas pero los nuevos personajes prometen ofrecernos buenos momentos (aunque por el momento, parece que solo Unique puede hacer sombra a los protagonistas anteriores, en cuanto a personalidad, que no a tramas, donde ahi nos meten el nuevo triángulo amoroso emulando a Quinn,-Finn-Rachel con animadora-hermano de Puck-chica sosa pero maja), y más tras saber que están trabajando ya en el episodio dedicado a "Grease".
Pero la parte que más estoy disfrutando quizás sea la de NY, porque seamos claros, Rachel siempre ha sido y será el centro de Glee, y verla cumpliendo su sueño está siendo delicioso (y si, Kate Hudson tiene mucho que ver en ello).

El pero que hasta ahora le veo, está siendo la trama de Kurt, no porque no considere que pueda trabajar en el mundo de la moda, sino por la facilidad con la que ha conseguido todo. Por no hablar de lo fácil que la jefa se lo está poniendo (¿acaso Sarah Jessica está interpretando de nuevo a Carrie con uno de sus asistentes?).

Aun con este pequeño detalle, que tampoco es que moleste, es de justicia reconocer que las cosas se vuelven a hacer bien. Es cierto que buena parte del humor característico de la serie, de esa mala leche inicial, se ha ido desvaneciendo poco a poco (aunque a veces tengamos algún destello), lo hace en favor de una madurez que le está sentando de maravilla. Y como prueba, el último episodio emitido "The break up" y una escena: la canción de Blaine a Kurt. Maravilloso.
Read More

Estrenos 2012/13: ¿Esto es lo que nos teniais preparado?


Tiempos ajetreados para cualquier seriéfilo, pero muy deseados, porque nos encontramos en plena avalancha de estrenos y regresos. El problema es que esta remesa de nuevas series que estamos viviendo está siendo de las más flojas que mi mente alcanza a recordar. Hasta la fecha le he hincado el diente a más de una docena de series de las cuales solo 4 han conseguido que continúe más allá del piloto, más por rellenar huecos de la temporada anterior que por que me hayan picado excesivamente la curiosidad.

Las que jamás debieron ver la luz:


- Elementary: Por que es básicamente un procedimental más para el saco de la CBS que aprovecha el nombre de Holmes para atraer al público. Un engaño, porque no aporta nada al clásico quedándose en un simple procedimental.

- The Neighbors: Comedia blanca y sin gracia sobre un grupo de alienígenas que conviven con una familia terrícola en una urbanización. Nada, cero. 

- Animal Practice: Un veterinario, sus particulares ayudantes, la tensión sexual de manual con su ex (que encima es su jefa) y un mono ayudante. Nada nuevo, nada bueno. Mala, peor, pésima. NO.

- 666 Park Avenue: El terror está de moda garcias a American Horror Story y esta serie pretende vivir de rentas, porque poco o nada aporta al género. Personajes sin miga, malos de caricatura y tramas insípidas. Totalmente fallida.

- Partners: ¿De verdad de los creadores de Will & Grace sale esto? Si, son dos parejas de las que en realidad salen 3, pero misteriosamente se olvidan de la química necesaria para que una comedia funcione.

- Guys with kids: Aun siendo mejor de lo que me esperaba, y habiendo visto los dos primeros episodios, me bajo del carro ante una serie simple (pero correcta), antigua y cero estimulante (principalmente su gran probelma, es totalmente intrascendente, no aporta nada).


Esto no es para mi:

- The Mob Doctor: Nos encontramos con una especie de crossover entre una serie de médicos y una de mafiosos, que precisamente encuentra su premisa su mayor enemigo, ya que dificilmente llega a conciliar las dos series en una sola. No es mala, y podría incluso llegar a resultar interesante, pero no me convencen ni los médicos ni los mafiosos.

- Last Resort: Siendo un piloto más que aceptable no consigo conectar ni con personajes ni con tramas o conflictos. Pero el problema no creo que sea suyo, sino que el tema bélico no puede interesarme menos. En cualquier caso no me sentiré mal, porque no creo que dure mucho en antena...

- Revolution: Serie apocalíptica de la nueva era, es decir, drama familiar aderezado de tanta acción como el presupuesto lo permita salpicado de algún misterio. En este caso es la desaparición de la tecnología del planeta, algo que logra picar un poco la curiosidad pero que al no estar sustentado sobre unos buenos personajes hace que se pierda completamente el interés.


Por el momento, compro:

- The New Normal: No es nada del otro mundo, pero aunque solo sea porque Ryan Murphy está detrás, y porque los protagonistas son homosexuales, voy aguantando. Tiene puntos graciosos y los personajes el suficiente potencial para terminar enamorándome.

- Go On: No es por lo que es, sino por lo que puede llegar a ser. Actualmente es una comedia simpática, pero tiene muchas papeletas para ser la nueva Community. Versión más simple y dulzona, si, pero Community al fin y al cabo.

- The Mindy Project: No soy un gran fan de las comedias románticas, pero precisamente por ello creo que esta serie puede conquistarme gracias a la parodia que hace de ellas. Mindy quiere ser Bullock, Anniston o Ryan, y seguro que por el camino nos hace pasar muy buenos ratos.

- Ben and Kate: Piloto simpaticón que sienta las bases de unos personajes entrañables y de una dinámica muy bonita entre ellos. Por ahora no pasa de ahí, pero al menos ha conseguido transmitir más que la gran mayoría de estrenos de lo que es y lo que quiere ser. Y yo lo compro.
Read More