Mis últimos contactos seriéfilos

Mis últimos contactos seriéfilos

Como ya sabeis este pasado mes terminaba dos de las grande joyas que nos ha dado la HBO, como son Roma y Six Feet Under, y una de las comedias revelación de la temporada como ha sido Community, por lo que tenía un importante hueco que cubrir.La primera serie a la que le hinqué el diente fue a Wonderfalls, serie que llevaba mucho tiempo cogiendo polvo en mi disco duro pero a la que siempre le he tenido muchas ganas. A decir verdad, no tenía mucho conocimiento de qué trataba la serie, pero que fuese de Bryan Fuller ya era un punto muy grande a su favor. Y si ya hay muñecos que hablan de por medio la cosa ya pinta muy bien.El punto de partida de la historia, para los que no la conozcan es la vida de una dependiente de una tienda de souvenirs a la que un muñeco le empieza a hablar. Poco a poco va descubriendo que las palabras de los muñecos le sirven para ayudar a la gente.La protagonista no puede ser más pasota y más vaga (no hace falta decir que eso son dos puntos a su favor), su familia tiene puntos muy buenos y su flirteo con el camarero promete (él me encanta), pero los casos no me terminan de convencer, no me consiguen interesar, y si tenemos en cuenta que llevan casi todo el peso del capítulo....la cosa no termina de engancharme.

He visto los primeros tres capítulos, y me han dejado esa sensación agridulce, ya que tiene aspectos que me llaman mucho, pero en el aspecto más procedimental es donde no consigue conectar conmigo.Al ser solo una temporada de 13 capítulos probablemente continue con ella poco a poco, porque escribiendo sobre ella me doy cuenta de que me apetece ver por donde siguen las cosas para Jaye.


El segundo intento fue con otra de mis grandes pendientes, Studio 60. Que trate sobre el cómo se hace un programa de televisión al más puro estilo Saturday Night Lights ya era un puntazo a su favor, y reencontrarme con Matthew Perry ya no digamos.
Peeero tampoco he conectado, aunque solo he visto el piloto la historia no me terminó de convencer. Vale que debería de ver alguno más antes de juzgar, pero nose, no me ha terminado de transmitir mucho. Aun asi prometo intenarlo de nuevo, aunque sea más adelante, que Community me costó tres intentos y al final la disfruté mucho.


Y a la tercera fue la vencida, más o menos, porque le tocó el turno a Verónica Mars, esa gran protagonista a la que todos adoraban no podía decepcionarme. Y vaya por delante que no lo ha hecho, pero no me esperaba así la serie.
Me explico, Veronica es muy grande, una joya de personaje al que es imposible no adorar, pero me ha sucedido algo parecido a lo de Wonderfalls, que no contaba con que fuese a resultar tan procedimental. Pero bueno, al menos con Veronica Mars tenemos un par de tramas transversales que mantiene el interés. Por lo tanto, me la quedo, ya no solo por Veronica, sino por un par de personajes más que prometen darme mucho juego (y esa relación el padre, claro está).


¿Y cuál fue la comedia elegida tras Community? No es otra que The Middle, la cual ha pesar de no haber destacado especialmente en la noche de comedias de la ABC ha conseguido hacerse un merecido hueco.A decir verdad he conectado muy bien con todos los personajes desde el minuto uno, pero lo paso fatal con cada capítulo, ya que todo le sale más a esa familia que se encuentra con el agua al cuello. Es una sensación parecida a la que me daba Sam en Worst Week, ya que sabías que iba a meter la pata, o con Michael en The Office. Solo que en esta la sensación de angustia se acrecienta. Me costará lidiar con este aspecto, pero espero superarlo poco a poco ya que esa familia promete mucho.

Estos son mis contactos más recientes, de los que por ahora solo seguiré con Veronica Mars y con The Middle, pero como decía antes, terminaré retomando Wonderfalls y Studio 60 tarde o temprano, sobretodo la de las cataratas del Niágara, que esos muñecos parlanchines me tienen un poco mosca.